Paper Mario, papel del bueno

Desde su primera aparición en la gran Nintendo64, encandiló a todo tipo de público con su estilo visual como hecho de papel, su comedia única, combate por turnos y sistema RPG. Su segunda parte fue otro pelotazo pero, a partir de ahí, empezó a perder su esencia.

Paper Mario apareció por tierras europeas en 2001 para la consola Nintendo64. Es un RPG por turnos como lo fue Super Mario RPG para la NES o la posterior saga Mario&Luigi para GBA. En realidad la saga tiene actualmente 4 juegos y está a la espera del próximo llamado Paper Mario: Color Splash. En mi opinión los que valen son los 2 primeros. Clónicos en cuanto a sistema pero inmejorable el segundo llamado Paper Mario 2: The Thousand Year Door, para GameCube. Super Paper Mario llegó a Wii con un sistema completamente distinto, había perdido los combates por turnos y los compañeros son unos seres extraños llamados «pixelitos». Pierde completamente su sistema RPG (subida de nivel, mejora de armas o compañeros, entre otros) con Paper Mario: Sticker Star para 3DS,  donde utilizas pegatinas para vencer a los enemigos de papel. No quiero ni conocer cómo será Paper Mario: Color Splash, porque para mí la saga acabó con los dos primeros. Así que voy a hablar del primer juego.

La historia es la misma repetida en los «Mario»: Bowser secuestra a la princesa Peach con la ayuda de la Varita estelar, la cual utiliza contra los 7 Espíritus estelares convirtiéndoles en cartas, ya que éstos pueden inutilizar la varita que da invencibilidad y poderes a quien la usa. El juego comienza de este modo con Mario como nuestro protagonista, intentando vencer a Bowser en el castillo tras haber raptado a la princesa. Sin embargo, nos es imposible porque está imbuído con el poder de la Varita estelar. Nos pega una paliza, se lleva a la chica y nos mandan a casa.

Bowser haciendo gala de un poderío’ inigualable al comienzo del juego.

La trama está clara, necesitamos despertar a los 7 Espíritus estelares para que nos ayuden a vencer a Bowser y así poder salvar a Peach. Hablando de lo que son los «juegos Mario», lo que hace único a mi parecer a este juego (aunque en la saga Mario&Luigi también hay detalles) es la comedia innata que hay en todos los personajes, poder llevar compañeros en combate, entre otros. Pequeñas tonterías que llenan de humor el ambiente de manera muy divertida. Cada compañero tiene una habilidad única, un ataque «ultra» y un modo de combatir. A veces el juego te pedirá que utilices a uno u otro, incluso para ciertos combates comprobarás las ventajas que tiene cada uno sobre un enemigo. Como es normal no comienzas con todos, se irán uniendo a tu aventura conforme vayas avanzando. Mario utiliza como arma principal un martillo que servirá para activar botones y golpear cosas. Las estrellas (espíritus estelares) podrán ser utilizadas más adelante también en combate.

Goombario, un goomba muy salao’ que te ayuda con las descripciones de los lugares, los personajes y las cosas. Este es uno de los que más tonterías dicen en el juego, es divertido oírle decir lo que piensa de las cosas. También te será útil en momentos del juego puntuales. Kooper, un koopa que sirve para activar botones lejanos o alcanzar objetos desde otras plataformas. Bombette, una bob-omb que explota y te ayuda a abrir grietas de las paredes o destruir cosas. Parakarry es mi preferido, muy majo, un paratroopa que es cartero. Te sujeta y lleva volando a zonas de corta distancia imposibles de llegar de un salto. Watt es un solete, una pequeña chispa bebé que te ayudará a iluminar estancias oscuras y revelar objetos invisibles. Sushie es un amigable cheep-cheep que te ayudará a pasar sobre lagos y bucear (esto se agradece mil en su zona). Por último se encuentra el lakitu Lakilester, un pícaro secuaz de un jefe que, al ser vencido, se une a ti. Te permite flotar sobre lava o pinchos.

Cada uno tiene su propio carácter, pero te encariñas rápido con ellos.

Todo esto ocurre contado como si de una obra de teatro se tratase. Cada zona es un capítulo donde la mecánica es resolver puzles, conseguir a un compañero y rescatar a una estrella. Cuando consigues a todas te diriges a por Bowser y, si todo te sale bien (si has entrenado lo suficiente), te acabas el juego. Recordemos que esto es un RPG y hace falta entrenar y subir PC (Puntos Corazón), subir PF (Puntos Flor) o subir PM (Puntos Medalla). Los Puntos Corazón son la vida de Mario, necesario para aguantar más en combate los golpes. Los Puntos Flor te permiten usar habilidades en combate, tanto tú como tu compañero. Por último y no menos importante, más bien es el MÁS importante, son los Puntos Medalla. Esto te permitirá equiparte medallas que te darán mejoras (marear enemigos, pinchar al enemigo si te toca, hacer contraataque…), obtener objetos tras combate, ser inmune a estados, hacer nuevos movimientos en el juego o chorradas como poner un sonido de rana al dar un golpe de martillo.

¿He dicho que los combates son un punto interesante? Pues sí. Porque estás en un escenario y tienes público. En Paper Mario 2: The Thousand Year Door hasta están visibles y te tirarán monedas o te abuchearán si Mario es golpeado por un enemigo. Pero de este juego hablaremos en otro artículo.

Otra cosa interesante en este juego es la posibilidad de saber qué hace Peach mientras está secuestrada. Algo que nunca antes había ocurrido en esta saga. ¿Qué ocurre con Peach mientras está raptada? ¿Se aburre en una sala? ¿Hace amigos? ¿Se pelea con Bowser? Sí a todo.

Hay enemigos que son desagradables y otros que te pedirán algo a cambio de ayudarte.

Ella intenta por todos los medios irse pero siempre será devuelta a su cuarto. Hay pequeños minijuegos junto a una amiga que se echa (una pequeña estrellita que cae del firmamento) para descubrir cosas que puedan ayudar a Mario en su aventura, enviándole SMS a su móvil. Muy moderno todo.

Este juego tiene un huequito en mi corazón que sólo es superado por su secuela Paper Mario 2 donde alcanza, a mi parecer, el culmen del cachondeo y maravilla de juego. La mecánica, el sistema RPG, los compañeros y personajes en general, la tónica del juego, los niveles, la estética… todo es genial. Os lo recomiendo encarecidamente si no habéis jugado, porque es uno de los mejores de «los Mario» de la gran N64. Uno de los que da que hablar y muy positivamente.

Os dejo el tráiler, está en inglés pero el juego llegó aquí en español. De todos modos, es un inglés muy básico. ¡Nos vemos en la secuela!