La importancia de la personalidad de Yuna para el desarrollo del FFX
11/08/2017 | anuhiu | 12 comentarios
Si le preguntas a alguien que haya jugado al Final Fantasy X cuál es su personaje favorito, o cuál es el que más le ha gustado, lo más probable es que te digan que Auron es el mejor. Y sí, probablemente tengan razón, Auron mola. Su personalidad misteriosa y fuerte, su diseño y su historia lo hacen uno de los personajes más queridos de la entrega, pero ¿y Yuna? ¿Qué pasa con ella?
Yuna se consolida como la protagonista del juego, junto con Tidus. La historia que nos cuentan está centrada en su peregrinaje y los sacrificios que tiene que realizar para cumplir su misión pero ¿por qué nadie la menciona a la hora de escoger un personaje?
Podríamos plantear ciertas hipótesis y decir que es porque es una chica, que tiene apariencia débil o porque sus habilidades de maga blanca no eran las más guays cuando tú lo jugaste por primera vez y preferías a alguien que les repartiera bien a los enemigos.
Independientemente de las razones que te llevaron a pensar que Yuna no se merece un rinconcito en tu corazón, es el momento para darle una segunda oportunidad.
ATENCIÓN SPOILERS
Una de las muchas veces en las que Yuna ve con sus propios ojos lo que Sihn es capaz de hacer
Yuna es una de los muchos invocadores que realizan un peregrinaje para poder conseguir un eón supremo y así poder derrotar a Sihn. Como ya he dicho, ella no es la única, hay muchísimos invocadores más con el mismo objetivo y a lo largo del juego nos encontramos con un par de ellos, por ejemplo Donna o Isaaru.
Tanto Donna como Isaaru se rinden a mitad de camino, la duda les invade y comienzan a pensar que esto de ser invocadores no vale para ellos, es demasiado duro. Es cierto que Yuna también pensó en rendirse, pero ella tenía el doble de presión que tenían Donna o Isaaru. A ellos no les habían declarados traidores a Yu Yevon, así como tampoco eran conscientes de que todo en lo que habían creído a lo largo de su vida estaba basado en mentiras e intereses de los más poderosos.
La razón por la que Yuna acepta ser invocadora es discutible, así como puede parecer una elección propia, es evidente que existe cierta presión social que viene dada por el Alto Invocador Braska, que trajo la Calma los últimos 10 años y que, casualmente, también es el padre de Yuna.
Yuna tenía unas expectativas que cumplir por ser la hija del Alto Invocador y esto se demuestra a lo largo del juego cuando hablas con la gente de Spira, lo mucho que admiran a Yuna única y exclusivamente por ser la hija de Braska, y que tienen todas sus esperanzas puestas en ella. Confían en que una niña de 15 años les asegure poder dormir con la tranquilidad de vivir un día más.
Yuna ve así el ser invocadora como su destino inamovible que la obliga a recorrer los mismos pasos que su padre para acabar recibiendo el mismo trágico final que le esperaban a todos y cada uno de los que pretendían ser Altos Invocadores.
Pasa de la absoluta inocencia propia de una niña pequeña que ni si quiera entiende realmente lo que es la muerte a aceptar la misma como la única salvación de Spira.
Lo comentaba Tidus una vez que llegabas al camino de Miihen y me parece que es de las frases que más importancia tiene dentro del juego, y es que Yuna tenía que sonreír por Spira, intentando siempre ser aquel rayo de luz que tanto necesitaba su pueblo.
Cuando acepta casarse con Seymour simplemente para que la gente de Spira tenga otra cosa de qué hablar además de Sihn, DUDE.
Desconocemos si existen invocadores más jóvenes que Yuna, sin embargo ella comienza su peregrinaje a una edad muy temprana, en plena edad del pavo. Salvando las distancias entre realidad y ficción, a Yuna se la ve muy madura y con las ideas claras, conservando su inocencia juvenil, pero al fin y al cabo ha decidido enfrentarse a algo de lo que probablemente no pueda salir viva y lo ha aceptado como su destino.
Yuna se configuraba como una víctima y como una heroína. Una víctima más del sistema que prácticamente la obligaba a convertirse en una mártir por su pueblo, por la presión social que significaba vivir a las espaldas de los logros de tu padre, esperando cumplir las expectativas de todos y cada uno de los habitantes de Spira. Y al mismo tiempo una heroína por no perder jamás la esperanza de salvar tanto a Spira como a todos aquellos que te acompañaron en el viaje, no queriendo perder para tener que ganar.
Así como todos los personajes del juego, Yuna también evoluciona a medida que se desenvuelve la historia, siendo los puntos más importantes: el juicio en Bevelle, la escena con Tidus del Bosque de Macalania y la pelea contra Yunalesca. Aquí fue donde Yuna ve destruido todo aquello en lo que creía, se valoraba mucho más una tradición que todas aquellas personas que habían sido víctimas del terror de Sihn.
Es cierto que hasta esos momentos Yuna había seguido tal y como debía lo que Yevon dictaba, porque era eso lo que tenía que hacer, pero no podía seguir aguantando cómo los más fuertes se reían de los más débiles y es así como decidió plantarles cara y consiguiendo (con ayuda de sus guardianes, claro, que os veo venir) eliminar la tiranía de Sihn y Yevon definitivamente.
Y para finalizar… el romance, lo carnal, la relación de Yuna y Tidus. Es cierto que Tidus fue un apoyo superimportante para Yuna, pero también lo fue a la inversa. Yuna fue la primera persona que creyó a Tidus en todo lo que él contaba sobre Zanarkand y le encantaba que le contara historias de donde venía.
Esto fue esencial para la relación entre los dos, Tidus encontraba en ella un lugar seguro donde no le iban a tratar de loco y Yuna encontraba en él una esperanza de salir viva de la pelea contra Sihn. Esa relación de mutua confianza significó que en muy poco tiempo se consolidaran como algo más que amigos.
Aquella relación que parecía la más bonita y sana del mundo se ve rota por un final trágico, que Yuna tiene que aceptar, porque aunque su pelea contra Sihn le ha enseñado que siempre hay una manera diferente de solucionar los problemas, en este caso no lo había y tenía que dejar ir a aquella persona que más la había apoyado durante su viaje y también, a su primer amor (así salió el FFX2, que la gente se puso muy triste y tuvieron que traer a Tidus de vuelta, pero eso es una historia para otro día.)
En definitiva, Yuna merece muchísimo más reconocimiento del que ha tenido siempre, porque no sólo es una niña inocente, también es una mujer que lucha.
(Todas las capturas han sido sacadas de mi copia de Steam.)
Diseñadora de lo cutre y cosplayer de desgraciaos. Soy la única persona en este mundo que todavía sigue obsesionada con el Final Fantasy X.
Etiquetas: FFX, final fantasy, final fantasy x, personajes femeninos, square enix, yuna
Cuando Yuna terminaba su círculo de habilidades lo mejor era que fuese al de Lulú (para hacerlo más entretenido, yo le hacía aprender algunas habilidades de magia negra antes para poder ir repartiendo estopa) y oye, chetadísima. Pegaba más ella que los demás personajes que había subido al mismo tiempo, así que como no le voy a tener cariño? Además, tenía mascotas!!! Yuna es guay sin tener que enseñar medio culo. Recuerdo que a mí me pasó como Tidus en el juego, me quedé prendada de Yuna cuando la vi bailando en Kilika enviando las almas, así que, aunque fuera un coñazo cambiarla del equipo cada 2×3, no se perdía ni una batalla.
Cuando llegué en la parte que lucha sola, la tenía tan chetada que si hubiera habido automático habría podido luchar sin mí y yo irme a echar una siesta la mar de tranquila xD
Así que ya véis, más de acuerdo con vosotras no puedo estar, si aún a estas alturas, cuando vuelvo a coger el juego, sigo la misma estrategia: Yuna y Tidus juntitos luchando a tope, el tercer miembro… depende del día que tenga xD
El modo en que Yuna manda a las almas de los caídos en batalla al otro lado es de las cosas más bellas que he visto en un videojuego, hay algo sagrado en esa primera cinemática en una isla. Buen artículo aunque no lo leí completo porque justo me lo estoy pasando en la vita.
Una de las cosas que más me enamoró del FFX fue el ver como evolucionaban los personajes y cada uno iba procesando sus propias taras. Hasta el mismo Wakka. Pero por más que Tidus se empeñe en que esa es su historia, FFX es claramente la historia de Yuna. Su peregrinaje es el hilo que mueve (y para, cuando toca) todo lo demás. Cuando en el Hogar Tidus se entera de que si Yuna invoca al Eon Supremo morirá me entró una llorera tremenda, y es el único juego que ha conseguido eso. Fue ese momento de atar en un segundo todos los cabos de eventos de eventos anteriores, la actitud de Yuna… Es un personaje muy bien construido, a mí me resulta mucho más naif Tidus que ella. Porque aunque la historia de Tidus no es mala, el rollo huérfano-resentido-buscando-su-lugar-en-el-mundo está más que visto en la saga, para qué engañarnos.
Si sacas a Yuna no hay FFX. Si sacas a Tidus cualquier Shuyin podría ocupar su lugar…hasta Auron es más necesario a nivel de historia que él. Y no desprecio al personaje, que me gusta, pero es que es así.
A mi me caen todos como el culo. O bueno, me caían hace 15 años que ahora ya ni me acuerdo e igual rejugándolo lo veo de otra forma XD
Yo tengo que decir que le tengo tirria a Yuna porque en el único momento que la manejas, su maravillosa falda con vuelo, se transforma mágicamente en una falda de tubo rígido que la obliga a dar pasitos en unos pasillos interminables.
Por lo demás, muy buen artículo, y aunque este juego no sea santo de mi devoción, me gusta leer a chicas defender las cosas que le gustan tan bien 🙂
Me pasa algo parecido que la alutor/autora del articulo.
En mi primera partida al FFX alla por la play 2, todo el protagonismo se lo comia Auron y luego tidus.
Han tenido que pasar los años y ahora en Steam con la version HD remastered y con un pequeño mod que me permitia tener las voces en Japones y los textos en ingles he cambiado drasticamente my opinion sobre los personajes de este videojuego.
Tidus se ha convertido en un segundon y cada vez que afirma que «esta historia es suya» resulta mas patetico, la historia es el viaje de YUNA y se ver perfectamente la brutal evolucion hacia la madurez de ese personaje, Tidus es el testigo, en primero lugar y luego catalizador de parte de ese cambio, pero cuando antes del encuentro con Yunalesca despues de que manden todo su mundo y lo que creia justo a basura con unas pocas frases, se ve la fuerza del personaje de Yuna, como toda la evolucion primero rechazando el que ser una hereje le impida seguir adelante y despues que todo fuese una gran mentira tampoco la «tumba» y sigue adelante buscando una salida, de ahi en adelante el personaje no hace mas que mejorar y mejorar hasta el final del juego. (lo del FFX-2 hare como si no hubiese existido…)
Otra cosa es que la historia y el personaje de Auron siguen siendo magistrales, el tipico caso de un secundario que casi se come al actor principal
y yo… yo también sigo obsesionado con el FFX.
Nunca vi a Tidus como protagonista, ami me parecia Yuna y Tidus solo era el interes amoroso de esta xD.
Por cierto igual soy el unico, pero uno de los motivos por los que no me mola FF X es porque soy bastante completista pero se me hace pesadisimo hacer todos sus putos minijuegos y al acabar el juego solo Yuna tenia su arma de los siete astros y claro en las batallas finales, era ella la miembro obligatoria, practicamente era:
Empezar con Lulu y Auron
Auron usa rompemagia
Lulu la de aumentar el ataque magico
Y ahora, solo hace falta que disfrutes como Yuna sodomiza a los bosses con su Santuc, bueno, si se nos ponen muy chulitos le hacemos una invocacion con su limite de daño expandido y para casita Jetch xD
Una cosa más:
a los amigos perdidos… a los sueños desvanecidos… no los olvidéis.
Excelente artículo. En efecto, la primera vez que lo jugué mia personajes favoritos eran Tidus y Aurom (tenía 15 años de edad). Lo retomé con los años me percaté, en primer lugar, que si bien es cierto que todos son protagonistas, Yuna es la principal junto a Tidus, pero al hablar del desarrollo y evolución del personaje, Yuna se queda con todas las palmas, por encima de cualquier otro de FFX.
Final Fantasy X fue uno de los muchos juegos que me perdí n mi infancia por mi mala capacidad a la hora de escoger los juegos que mis padres me compraban tanto en navidades como por mi cumpleaños, así que en cuanto vi la oferta en game, de Final Fantasy X/X-2 por 20 euros, no pude resistirme a comprarlo. Tras más de 100 horas en cada título, sigo sin considerarme un experto en el juego (sería muy hipócrita por mi parte), pero me veo perfectamente capacitado para hablar de él. Tenéis razón, Auron mola mucho, pero es un support (aunque la maga blanca sea Yuna), si quitas a Auron, quizás el juego pierda un poco de epicismo, pero seguiría siendo un juegazo. Si quitas a Tidus, más de lo mismo, la historia no sería tan buena, pero la línea arguemental podría seguir su camino y llegar al final del juego dejando al usuario con buen sabor de boca (lo mismo pasa con Rikku, Wakka, Lulu y Kimari).
Pero Yuna… Yuna es el alma de Final Fantasy X, sientes lástima por ella cada vez que sus ojos se pierden en el cielo mientras se piensa en su sacrificio, y das un leve suspiro cuando sonríe esperanzada, esperando que haya otro final aparte del que le deparan a Yuna en los santuarios.
Sin Yuna no habría habido Final Fantasy X… O sí lo habría habido, pero habría sido una mierdo enorme de la que no merecería la pena hablar.
Cuando empecé a leer el artículo, arrugué un poco el morro al ver que, al parecer, Auron es el favorito del juego de forma popular. Será que he comentado poco este juego con otras personas y desconocía este hecho pero para mí, desde el minuto uno, Yuna fue la protagonista del juego de principio a fin.
Que sí, que Auron mola: misterioso y poderoso, cosa que el sabe, y un poco sobraete por ello pero Yuna es otro nivel. Es imposible no empatizar con ella cuando todas las piezas se juntan y enamorarse todavía más de ella