Silent Hill 2

El reflejo de lo que somos: Silent Hill 2

El reflejo de lo que somos: Silent Hill 2

Después de lo que supuso Silent Hill en la industria del videojuego (cuyo análisis podéis leer en este artículo) probablemente la segunda entrega de la saga se ha convertido en la más famosa de todas y de la que mejor recuerdo guardamos los seguidores de la misma. En este segundo título, el juego coge todos los elementos que hicieron grande a su antecesor y los eleva a otro nivel, transformándose en algo completamente distinto al primero (no se trata de una secuela propiamente dicha, ya que no sigue su línea argumental). Mantenemos el ambiente opresivo de la ciudad, así como esa niebla interminable que lo envuelve todo y el hecho de que, de nuevo, no se trate de un título cómodo con el que pasar un rato divertido.

En septiembre de 2001 vio la luz Silent Hill 2, programado de nuevo por el celebérrimo Team Silentresponsable de las cuatro primeras entregas de la saga, siendo muy esperado por todos aquellos y aquellas que aplaudimos lo que habían sido capaz de hacer en la consola de 32 bits de Sony. Aguardábamos más y no se nos defraudó: El lanzamiento de este título en una nueva plataforma (Playstation 2), mejorando notablemente los gráficos y con una banda sonora espectacular de la mano de Akira Yamaoka (personalmente es mi favorita de toda la saga y sin duda ayudaba horrores a que la inmersión fuese completa creando una partitura redonda, ya no sólo como hizo en el primer título creando un par de temas épicos y el resto de acompañamiento, aquí nos encontramos ante una banda sonora que desde el primer al último tema hace que te identifiques más y más con la trama), propició que al mes de su salida llevase vendidas más de un millón de unidades. De hecho fue la primera toma de contacto de muchas personas con el universo Silent Hill y quizás el que como decimos al inicio de este artículo con más cariño guardan en su memoria: sólo hay que hacer una pequeña encuesta entre los jugadores y jugadoras de la saga para que casi en su gran mayoría te respondan que es su entrega favorita.

panoramica

Lo idílico de mirar Silent Hill desde la distancia de desconocer lo que nos espera…

—A partir de este punto os encontraréis con algunos spoilers del juego (quitando el final, que prefiero no revelar), así que si queréis afrontar la experiencia de Silent Hill 2 sin saber nada, os recomiendo no seguir leyendo.—

Empezamos el juego con James Sunderland, nuestro protagonista, avanzando hacia Silent Hill. Ha recibido una carta escrita por su mujer citándolo en el pueblo: Hace años pasaron en él unas vacaciones y ella siempre quiso volver. Hasta aquí no debería parecernos nada raro, con la excepción de que Mary, la esposa de James, lleva muerta tres años debido a una enfermedad degenerativa.

Así que podéis imaginaros el desconcierto de James al recibir una carta de su mujer muerta citándolo en una ciudad que ahora mismo y en estos instantes se encuentra totalmente vacía y cubierta de niebla (marca de la casa como también explicamos en el primer artículo). A lo largo de su periplo buscando a Mary, se encuentra con varios personajes que al igual que él han sido atraídos de algún modo a Silent Hill, así como con monstruos desconcertantes que le impiden llegar al misterioso encuentro por el cual está aquí.

james.gif

James ante el espejo: una buena metáfora de lo que significará Silent Hill para él

Es en ese encuentro con ciertos personajes y monstruos donde se marca la gran diferencia con el primer título de la saga: mientras en Silent Hill 1 todo lo que veíamos a nuestro alrededor era una proyección mental de Alessa (una de las secundarias del primer juego) aquí lo que nos encontramos es un producto de nuestra mente, de nuestros peores miedos y que a medida que avanza el título vamos encajando en la trama y comprendiendo mejor tanto la personalidad atormentada de James como la verdadera relación con su mujer fallecida: el pueblo se convierte en un gigantesco espejo que lo único que hace es reflejar la auténtica naturaleza de James Sunderland y que nos será revelada en una serie de finales que para nada esperamos (atención al hilarante final conocido como “el del perro” y que hará que durante días estéis tarareando la música que nuestro amigo perruno ladra). También todo en este juego está cargado de simbolismos, ya sea respecto a la historia principal como a la de aquella de cuyos personajes se cruzan en nuestro camino… Con la diferencia como recalco del significado intrínseco que emana esta segunda entrega y que se haría extensiva sobre todo a los dos títulos restantes, y más indirectamente a todos los demás juegos que sin estar programados por el Team Silent, salen del tronco de los cuatro principales: simbolismos que al fin y al cabo siempre desembocan en una lucha contra los demonios de nuestro interior, mostrándonos por primera vez personajes no tan “blancos” en su planteamiento como el de Harry Mason (Silent Hill 1) y que sin duda caló entre los jugadores. En el plano jugable sí es cierto que toma casi por completo las maneras de su antecesor, calcando la fórmula (aquí sí) de un tipo normal y corriente sin preparación para el combate y que se cansa, apunta mal al correr y no tiene un arsenal amplio disponible a la hora de enfrentarse a los enemigos, muchos de ellos tomados del 1 pero otros sin embargo como decimos, representaciones de la psique de James.

angela eddie y laura

Angela, Eddie y Laura

Metiéndonos ya en harina, la primera persona con la que nos encontramos en Silent Hill 2 es Angela Orosco, que al igual que nosotros quiere llegar al pueblo para encontrar a su madre, a su hermano y a su padre. Lo que vamos descubriendo en los sucesivos encuentros con Angela es la historia de abusos sexuales por parte de su padre y su deseo de dejar de sufrir (como nos muestra cada vez que interactuamos con ella). Más tarde nos encontramos con Eddie, un adolescente con sobrepeso que ha sufrido bullying y que debido a las burlas que despertaba en su entorno, decidió armarse con una pistola y disparar a todos los que se reían de él. También podemos conocer a Laura, una niña que aparece en varios momentos cruciales del juego y que dice haber conocido a nuestra mujer en el hospital en el que ambas estaban internadas, siendo quizás el personaje más inocente de los tres que de algún modo u otro están viviendo una especie de purgatorio junto a nosotros.

Por lo tanto, hemos de destacar también que la proyección de Silent Hill que vemos, aunque se cruza puntualmente con estos tres personajes y en algunos momentos llega a converger de manera violenta (por ejemplo, cuando tenemos que enfrentarnos a Eddie o bien cuando nos vemos obligados a luchar con la representación macabra del padre violador de Angela Orosco), es distinta en cada uno. Como podemos ver en varios momentos en los que interactuamos con Angela, Laura o Eddie, cada personaje vive una “realidad” diferente a los demás, dentro de lo que es su propio infierno personal: así que en el caso de James, desde en el monstruo más pequeño hasta en el boss más impresionante nos encontramos con proyecciones única y exclusivamente de los miedos y frustraciones que tiene en su cabeza respecto a su relación con Mary. Es en este instante donde nos encontramos a los dos personajes que faltan en toda esta trama y que sin duda se convierten en las dos caras de una misma moneda, el antagonista (en la figura de Pyramid Head) y la esposa idealizada (representada en María).

María es un personaje que se aparece ante James en el pueblo y que es exactamente igual a su mujer fallecida, quitando el pelo y una forma de vestir algo más atrevida de lo que solía hacerlo esta. A lo largo de la historia lo acompaña y no hace nada más que morir delante de sus ojos de las maneras más inimaginables… Hasta que un poco más adelante vuelve a aparecer sin aparentemente recordar nada de lo sucedido. Como decimos, es una clara representación de la imagen idealizada que James guarda de su mujer y las muertes que María sufre constantemente como sus remordimientos a la hora de no poder afrontar el deterioro físico que sufría esta mientras padecía la enfermedad que la terminó matando. María representa todo lo que James pudo haber vivido con su mujer y no ocurrió, pero aun así e incluso dentro de esa perfección que representa María, no deja de morir, recordándole a James todo el dolor y todo el sufrimiento que la verdadera Mary pasó hasta morir y que no deja de atormentar a nuestro protagonista.

maria

La cara…

Por otro lado, Pyramid Head es probablemente el monstruo que más se recuerda dentro de toda la saga y no sólo por su aspecto amenazador (con una gran cuchilla, cuerpo humano y una gran pirámide oxidada en lugar de la cabeza) sino más bien por como decimos, lo que representa (y de nuevo acudimos a los remordimentos del protagonista): estos se plasman en el monstruo de una manera diferente a la de Maria, ya que en este caso se trata de la culpabilidad extrema a la hora de no haber podido hacer nada para evitar el fatal desenlace. Pyramid Head es implacable como la enfermedad y está ahí para dejarle bien claro a James (al menos aparentemente, ya que su verdadero rol nos es revelado al final del juego y es probablemente la gran traca argumental de la historia) todo aquello en lo que falló, sobre todo cuando una vez tras otra mata a María para recordarle constantemente lo anteriormente descrito.

pyramid head buena

…y la cruz.

Si nunca se ha jugado a un Silent Hill, recomiendo encarecidamente comenzar por Silent Hill 2, ya no sólo por ser más actual, menos acartonado y más jugable que el primero; sino por la trama, mucho más absorbente y atrayente a la hora de adentrarse en las calles de nuestro pueblo maldito preferido. También debo indicar que, de cara a nuevas jugadoras y jugadores que quieran probar el juego y aunque han transcurrido algunos años, me parece osado revelar los finales del mismo, así que salvo alguna pincelada los he obviado conscientemente. No quiero estropearle la diversión a nadie aun avisando de la incursión de spoilers, así que os diré que la mejor manera de averiguar qué se esconde detrás de las calles de un pueblo lleno de misterios, donde los mayores terrores a los que te vas a enfrentar son los que salen de tu cabeza y donde el espacio y el tiempo no tienen la menor importancia lógica es encendiendo tu PC o consola y adentrándote en la niebla.

Cómprame un café en ko-fi.com

Caty Cordero
Caty Cordero

Escribo cosas.

4 comentarios
Zak
Zak 22/01/2018 a las 10:44 am

Éste fue el último que llegué a terminar, y aunque me pareció mejor juego que el primero en casi todos los aspectos, siempre me pareció que le faltaba ese toque agobiante que tantísimo me enganchó del original.
Lo considero un juegazo pero me dió menos «miedo». El 3 lo empecé y dejé abandonado y los posteriores ni llegué a probarlos, así que espero con ganas que sigas con análisis de la saga, si decides hacerlo.

Gracias por el artículo!

Laura Tejada
Laura Tejada 22/01/2018 a las 2:55 pm

Para mí este Silent Hill es el más icónico de la saga y, aunque el 3 por ejemplo me gustó más, este siempre será el que recuerde como la «verdadera experiencia Silent Hill». Ahora lo que pasa es que la trama la veo muy manida y las mecánicas y puzzles me resultan irritantes (una, que se hace mayor), pero es indudable que sigue siendo un gran juego.

Karasu
Karasu 22/01/2018 a las 4:16 pm

Este Silent Hill no solo me parece el mejor con diferencia de toda la franquicia,es uno de mis juegos favoritos de todos los tiempos.De chaval ya había jugado a los Final Fantasy,a los Resident Evil y toda la pesca,pero ninguno me había causado un impacto tan grande como Silent Hill 2.De hecho esta entrega cambio mucho el modo en el que veía los videojuegos(una catarsis videojueguil xD).

Es verdad SH2 no es tan opresivo como el primer juego pero a pesar de eso el 2 me sigue pareciendo el más inquietante por lo reales que eran sus personajes y la forma tan retorcida de proyectar los demonios internos de estos en el pueblo-purgatorio.

Por cierto ese cambio de dirección entre 1 y 2 también viene porque el director del primer juego se puso a trabajar en Forbidden Siren.

Ana
Ana 07/02/2018 a las 5:05 pm

Ay, qué artículo tan genial ♥

La verdad es que tienes razón en lo que comentas, si tuviera que elegir mi favorito en la saga SH, sería claramente este. Aunque también lo elegiría como mi juego favorito absoluto por todo lo que te hace sentir: los simbolismos, las referencias ocultas incluso en cosas como los puzles, la ambientación, los personajes…

Y la banda sonora es, como dices, una pasada. Todavía se me ponen los pelillos de punta escuchando Love Psalm o Letters.

Además, es que es un juego que se puede disfrutar en solitario sin saber nada de la saga, por lo que es perfecto para nuevos jugadores 🙂

¡Ojalá hagas un nuevo artículo sobre los siguientes SH!

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.