Y cuanto más acelero…

Análisis de Monster Energy Supercross 6

Análisis de Monster Energy Supercross 6

Una cosa que intento activamente es no cerrarme puertas a la hora de elegir videojuegos. Las probabilidades de que no me guste un título que no me atrae son altas, pero también me he llevado alegrías y sorpresas en no pocas ocasiones. Por eso cuando nos ofrecieron Monster Energy Supercross 6 me lancé a jugarlo a pesar de mis reticencias. Los juegos de deportes se me dan terriblemente mal y mi experiencia en carreras se limita a Mario Kart, pero la vida es una lenteja.

Como su propio nombre indica, Monster Energy Supercross 6 es un título basado en la competición deportiva homónima. Se trata de un deporte de motor, derivado del motocross, cuyas carreras se desarrollan generalmente en estadios y emplean obstáculos y protecciones de fácil montaje y retirada, como dunas, rampas y bloques para demarcar los laterales del circuito. Es particularmente popular en Estados Unidos, país donde tiene lugar este campeonato y del que son originarios la mayor parte de los pilotos.

La franquicia tuvo su origen en 2018 con Monster Energy Motocross: The Official Videogame, pasando a Supercross desde su cuarta entrega en 2021. Aparecen por tanto características de los juegos anteriores, pero también incorpora importantes novedades. Lo primero que nos pide es que personalicemos a nuestro piloto, y nos da gran variedad de herramientas para hacerlo. Le asignaremos un nombre, apellido y mote a nuestro gusto, para a continuación elegir un tipo de cuerpo, donde A es masculino y B femenino. Me ha llamado mucho la atención la posibilidad de decidir incluso la estatura de nuestra protagonista, aunque como suele suceder, no hay variabilidad alguna en tipo de cuerpo. Las siguientes pantallas ofrecerán varios diseños predeterminados para que personalicemos al máximo nuestro personaje, y terminaremos decidiendo con qué moto queremos correr. Hay varias marcas para elegir, y no se diferencian entre sí más que en la skin del vehículo.

El menú del modo campaña, con el modo intermedio o rookie desbloqueado

Ya en la pantalla principal, tendremos varios modos de juego a nuestra disposición, dependiendo de qué prefiramos hacer o nuestro tiempo y habilidades. El más destacado es el “Modo campaña” o modo historia. En él, al igual que sucede en otros títulos como FIFA o NBA 2K, nuestro principal objetivo es llegar a lo más alto. En este peculiar camino de cero a héroe nos acompaña Jeremy McGrath, un famoso piloto estadounidense de supercross que nos irá desgranando cada aspecto del juego y será nuestro entrenador durante este periplo. Durante los tres niveles de dificultad de los que consta el modo campaña iremos desbloqueando diferentes características, tanto positivas como negativas. Así, en la fase intermedia o rookie podremos lesionarnos, por ejemplo, lo cual nos restará habilidad para ejecutar piruetas. Esto no ocurre en la primera parte (llamada futures), en la que nuestro objetivo principal será aprender los controles más básicos y terminar las carreras que la componen en el mejor puesto posible.

Conforme vayamos subiendo nuestro nivel de prestigio y obteniendo buenas clasificaciones, se nos otorgarán puntos que podremos gastar en mejorar nuestras habilidades como si de un RPG se tratase. Puede parecer anecdótico, pero que las lesiones nos afecten menos o que sea más fácil amortiguar una caída marca a veces la diferencia entre los primeros puestos de una carrera. Algo que llama mucho la atención es la posibilidad de volver hacia atrás en el tiempo durante unos segundos mientras estamos en carrera, y así poder evitar caídas y desvíos accidentales. No obstante nuestras oportunidades para hacerlo son únicamente tres, y si queremos obtener más lo lograremos ejecutando piruetas o consiguiendo vueltas rápidas y demás hitos.

Además de este modo historia, también contamos con partidas contrarreloj, en las que nos enfrentaremos a nuestro propio personaje en nuestras mejores actuaciones previas. Y, si se nos queda corto, podremos incluso descargar el “fantasma” de los mejores jugadores del mundo para medir nuestra habilidad contra la suya. Como en todo juego de carreras que se precie, tampoco faltan los campeonatos ni los desafíos en pistas individuales con características y normas a nuestra elección. En esta entrega destaca de forma importante el multijugador. Además, se ha incorporado el crossplay como característica novedosa, de tal manera que podremos competir con nuestras amistades sin importar en qué plataforma estén jugando.

Una moto durante la carrera de supercross, tratando de abrirse paso entre los pilotos

Si no tenemos ánimo competitivo también encontraremos nuestro lugar. La academia de supercross nos permite practicar nuestras habilidades y adquirir los conocimientos teóricos necesarios para ser auténticas profesionales en la materia, y en el modo de parque supercross conduciremos por diversos caminos y zonas plagados de obstáculos en los que podremos correr y ejecutar cuantas piruetas nos apetezcan sin presión alguna. Otro nuevo desafío incorporado en esta entrega se denomina “Rhythm attack”, en el que competiremos contra otros pilotos en una pista completamente recta, de forma eliminatoria hasta que solamente quede uno.

Cuando jugamos a Moster Energy Supercross 6, hay que tener presente que podríamos considerarlo como un juego de nicho. El supercross no es una disciplina tan extendida como otros deportes más universales, como el fútbol o el baloncesto, con lo que muchos de sus términos nos pasan desapercibidos. Por ejemplo, tuve que buscar qué era un scrub para poder hacerlo y ganar puntos extra. Otro punto negativo que encuentro son las físicas, ya que los accidentes están a la orden del día (al menos para novatas como yo) y el movimiento del personaje es más bien artificial, como si de un dummy se tratase. Y, aunque evidentemente no es el punto que más busca, el diseño de personajes es más bien tosco. El audio está en inglés, pero el texto está íntegramente traducido al castellano.

Monster Energy Supercross 6 es un producto que, sin lugar a dudas, está dirigido a un público concreto. Los personajes que aparecen, circuitos, vehículos e incluso opciones de personalización hacen las delicias de los fans del supercross, pero a quienes no conocemos la materia nos resultan un poco indiferentes. La jugabilidad no es destacada, aunque tampoco es mala. Pero el control muchas veces recuerda más al del coche de Cyberpunk 2077 que a un título de carreras. Sin embargo y a pesar de sus fallos, es un título entretenido con el que pasar un rato compitiendo, mejor si es contra alguien a quien le chifle este deporte y pueda ir enseñándonos los entresijos de la materia mientras decidimos quién es el rival más débil.

Cómprame un café en ko-fi.com

Alystrin
Alystrin @Alystrin

Cosplayer, otorrinolaringóloga, streamer y, sobre todo, mamarracha profesional. Cuqui del almendruqui que no dudaría en sacarte las muelas por tus "incorrecciones políticas"

No hay comentarios
Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.