O por qué es importante que los desarrolladores se responsabilicen de sus mensajes de odio
Cyberpunk 2077 y La Mínima Medida de Humanidad

15/09/2019 | mirandaikon | 2 comentarios
“Por años los nerds hemos querido que los videojuegos se tomen en serio, y ahora que el momento ha llegado, es esta misma gente quien se queja de que los tomamos demasiado en serio”. Devourbooks on TAY “How Transphobia Hurts Videogames”, traducción propia.
Uno de los juegos que, por lo menos en mi experiencia, hablando con amigues y conocides, ocupa uno de los puestos más altos en los corazones de la comunidad transgénero cuando se habla de nostalgia es Pokémon Cristal, y creo saber la razón, consciente o inconsciente.
Pocos diálogos nos validaron tanto en las primeras generaciones de consolas como la primera vez que un profesor Pokémon nos preguntó nuestro género y una vez elegida la opción no había confusión en su rostro, no había nada que explicar, nuestra aventura en Johto comenzaba tal como cualquier otra y era reconfortante. El tema no se volvía a mencionar y no había nadie ni nada en el transcurso de nuestro viaje que nos hiciera sentir que no éramos bienvenidos por el hecho de ser lo que somos o que cuestionara nuestra misma existencia.

La tradición ha continuado, con palabras mejor elegidas hasta los títulos actuales
Han pasado casi veinte años, y nuestras expectativas siguen siendo así de bajas, así de baja es la barra de la mínima medida de humanidad que tiene que tener un equipo de desarrolladores para no hacerme dejar el mando por un momento mientras reflexiono si vale la pena soportar el abuso para adentrarme más en el mundo de turno que ha sido desarrollado por gente que no lo piensa dos veces antes de usar mi identidad como un recurso humorístico, fetichista o que genere escándalo, disgusto o asco en el espectador.
Uno de los ejemplos más recientes de un juego comercial que ha generado muchísima expectativa en el mundillo y no logra ni de lejos, porque no podría importarle menos, hacer sentir incluida a la comunidad trans es Cyberpunk 2077.
“Lamentamos si alguien se ha sentido ofendido”
El estudio desarrollador de este juego de rol próximo a estrenarse, CD Projekt Red, no perdió tiempo para hacernos saber en dónde se encuentran en el espectro político respecto a derechos de la comunidad LGBT cuando respondió a un tweet usando la frase “Did you just assume their gender?!”, un meme muy reconocido que se utiliza ampliamente para burlarse de las problemáticas que vive la comunidad transgénero.
Luego de una muy patética disculpa en la que se responsabilizaba a las personas ofendidas y no al responsable del mensaje, los desarrolladores no nos hicieron esperar mucho tiempo para ofrecernos una nueva joya de la transfobia.
Kasia Redesiuk, la artista encargada de esta pieza en particular, insiste en que su intención era mostrar un mundo distópico a través del “yugo omnipresente de las todopoderosas corporaciones”, mensaje que falla monumentalmente en transmitirse en su representación: una mujer trans con un exagerado bulto entre las piernas que ocupa un tercio del espacio útil del gráfico.
Para entender por qué esta representación es tan dañina para nosotras, que resulta al parecer no tan evidente para la mayoría de los defensores de lo “políticamente incorrecto” en Twitter, es importante hablar de uno de los problemas que más afecta a nuestra comunidad: la fetichización.

La captura de pantalla en cuestión
Una de las formas más dañinas de discriminación positiva y con la que comparte anaquel es la de reducir a algún grupo oprimido a su existencia para el placer sexual. El fenómeno ha sido ampliamente estudiado en sus variantes raciales, como la fiebre amarilla o la “Jezebel” para describir el fetichismo racial asiático y afrodescendiente respectivamente, y cada vez se escribe y se habla más sobre esta versión de esta deshumanización sistemática que violenta a las personas transgénero, que aunque es más viejo que el feudalismo, apenas se vuelve un tema de interés general.
Para quienes denominamos “chasers” es decir, aquellas personas para las que somos exóticas quimeras afrodisiacas, la persona trans está reducida al papel de un objeto sexual. Esta es una forma de transfobia que persiste en la mayoría de las culturas, aprovechándose de la marginalización social y política, sin importar el lugar y lo avanzadas que puedan parecer las leyes de protección a la diversidad, la comunidad sigue sufriendo de injusticia social impune y se ve obligada a involucrarse en trabajo sexual insalubre, mal remunerado y que, según cifras actuales de The Human Righs Campain, se cobró de manera violenta por lo menos 26 vidas (es muy difícil darles seguimiento a estos casos, la mayoría de las víctimas viven en el anonimato y muchos cuerpos nunca son procesados) tan solo en los Estados Unidos durante 2018.
Por supuesto que toda mujer experimenta una gran cantidad de acoso y violencia sexual, simbólica o explícita en su vida diaria desde la mirada masculina, pero este tipo de acoso específico, que deriva objetificación desde la identidad sexual y da a entender que estamos en otro nivel de humanidad diferente al natural, es su propia categoría de violencia en sí misma y de la que es fácil ser testigos con tan solo colocar las palabras adecuadas en un buscador.
Es por esto que la representación de esta mujer trans fetichizada en una publicidad dentro del universo del juego es especialmente dañina. Es evidencia persistente de lo poco que los desarrolladores están interesados en conocer la experiencia y la cultura trans, y que lejos de intentar integrarnos en su universo, existimos solo para la gratificación vía explotación de quienes lo han traído a la vida.
Cyberpunk 2077 no es el único juego AAA moderno del que se puede hablar al mencionar esta problemática. En The Legend of Zelda: Breath of the Wild y la serie Persona de Atlus es posible encontrar estos mismos mensajes de ignorancia voluntaria, pero el argumento cobarde y deprimente de CD Projekt Red es especialmente doloroso pues ignora las múltiples y celebradas obras de ficción en el género cyberpunk y sus aledaños hechas por personas cis y transgénero que tratan la identidad de las personas no solo con el respeto que nos merecemos, sino que nos dan un lugar del cual sentirnos orgullosos, nos desarrollan y nos escriben como personas sanas, interesantes y normales más allá de nuestros genitales y cromosomas, nos potencian y empoderan como cualquier otro personaje en cualquier otra obra heteropatriarcal inspiradora, nos hacen parte de su mundo; nos muestran mucho más que la mínima medida de humanidad.
Cocinera e investigadora, obsesa del análisis de cultura pop; vive en Guadalajara, México, enseñándole a la gente a no terminar como ella.
No podría estar más de acuerdo. La mayoría de la representación es bastante deprimente y por eso las personas trans nos contentamos con cualquier mínimo de humanidad.
A mí me pasó que al entrar a Los Sims 4 y crearme un personaje exploté de euforia con una de las opciones. Puedes elegir si tu personaje mea de pie o sentado, si puede embarazarse o dejar embarazados a otros Sims, etc independientemente de su género, además de si quieres que tenga un aspecto más femenino o masculino. En mi opinión es el juego que mejor lleva el tema de la transgeneridad.
Hola Irene!
Gracias por tomarte el tiempo de leer mis borucas!, tengo rato queriendo jugar el 4, pero se que caeré en un pozo muy profundo y no se si voy a poder con esas desveladas ahorita, pero si lo tenía en la lista, ahora definitivamente lo tengo que jugar, suena a que tiene muchos elementos que ya deberían estar por defecto en todos los simuladores. Muchas gracias otra vez!