Esto es la leche

Análisis de STORY OF SEASONS: A Wonderful Life

Análisis de STORY OF SEASONS: A Wonderful Life

Cuando pensamos en cualquier juego de granjitas actual solemos encontrarnos siempre con ciertos elementos comunes que se cumplen como si fuesen requisitos inamovibles. Esto, en parte, es así principalmente porque funcionan todas y cada una de las veces, y deberíamos agradecérselo a las bases que sentó en su momento la franquicia de Harvest Moon, renombrada a Story of Seasons desde hace ya algunos años. Y de esa misma es de la que os vengo a hablar hoy con Story of Seasons: A Wonderful Life, un remake de Harvest Moon: A Wonderful Life que tiene sus luces y sus sombras pero que aun así consigue arrancarnos una cantidad absurda de horas sin que nos preocupe lo más mínimo.

Hacer un juego con una granja como elemento central no es un trabajo tan sencillo como mucha gente cree, y esto podemos verlo de forma muy clara en todos y cada uno de los títulos que se acaban yendo al fondo de las listas de Steam, sin ni siquiera conseguir llegar a hacerse un hueco en las tiendas online de las diferentes consolas. Tal vez hayáis oído a alguien hablar con cierto desprecio de este tipo de juegos, por puro desconocimiento, asumiendo que son títulos en los que te limitas a plantar una lechuga y esperar a que crezca, pero lo cierto es que justo esos son los que no llegan a triunfar. El componente de rol y de estrategia es algo difícil de equilibrar, y su ausencia o inestabilidad lo puede convertir en un juego tedioso, por lo que siempre tiene que acabar apoyándose en alguna trama para que funcione. Incluso cuando dicho argumento es la cosa más sencilla del mundo, la cuestión aquí es que consiga mantener todos los elementos en su sitio.

La primera vaca

En Story of Seasons: A Wonderful Life nos demuestran, una vez más, que ellos sí que tienen el tema controlado, y nos plantan en el Valle Olvidado para comenzar nuestra nueva vida. Allí conocemos a Takakura, un viejo amigo de nuestro padre con el que siempre soñó con tener una granja, por lo que nos ayudará desde el primer momento a que seamos quienes definitivamente la consigan. Takakura, además de nuestro vecino más cercano, ejercerá de figura paternal (o de tutorial) enseñándonos todo lo que podemos ir haciendo, aprendiendo o mejorando, nos ayudará a conseguir nuestros primeros cultivos y animales, y nos presentará a la gente del pueblo. Y, ni corto ni perezoso, nos dirá que a ver cuándo vamos conociendo pretendiente, que se nos está pasando el arroz y no precisamente en la paella. 

Sin embargo, en lo primero que nos vamos a centrar es en nuestra granja. Esta vez no nos tocará eliminar ruinas, matojos ni escombros, y es que Takakura nos ha dejado la granja lista y arreglada. Nuestra casa, pequeñita y acogedora, tiene todo lo que necesitaremos: una cama, una televisión donde ver el tiempo y los diferentes programas diarios, la cocina y un calendario que es probable que acabéis revisando a diario. Fuera nos encontraremos con una parcela en la que podremos plantar todas las semillas que consigamos o compremos, teniendo siempre en cuenta la época de siembra (por el bien de nuestros cultivos). Además de esa parcela, también contaremos con espacio para los animales, con un gallinero y un establo enorme, con la posibilidad de sacar al exterior tanto al ganado como a nuestros pollos durante los días soleados, para que disfruten. Aunque ello conlleve ir rebuscando huevos por el camino. Esas instalaciones en un inicio serán más que suficientes, pero a medida que vaya avanzando el tiempo, que ganemos dinero, y que Takakura nos vaya contando cosas, podremos ir ampliando y comprando máquinas que nos harán la vida más fácil. Sobre todo porque, llegado un momento, empezaremos a criar animales, lo que conllevará que tengamos que trabajar más duro para que a nuestros terneros no les falte de nada y podamos acariciarlos a todos. Y, por supuesto, todo lo que vayamos cosechando, ordeñando o recogiendo lo venderemos en nuestra caja “mágica”, de la que se encargará personalmente Takakura, llevándose todo y dejándonos el dinero al día siguiente. Y, de paso, quizá nos encontremos algún que otro regalito extra.

El huerto

A pesar de todo lo que tenemos que hacer en nuestra granja, en Valle Olvidado no son de trabajar de sol a sol, y es que en Story of Seasons: A Wonderful Life nuestros vecinos son todos personas muy pintorescas, con intereses muy dispares y, sobre todo, con muchas ganas de hablar. Allí nos encontraremos, sobre todo, a gente que durante gran parte de su vida estuvo en la ciudad, para después acabar en ese pequeño pueblo. Allí podremos visitar tanto sus casas como sus locales, pudiendo echarle un ojo a un laboratorio, una mansión en la que podremos abrazar gatos (aunque no llevárnoslos) o una minúscula fábrica de fuegos artificiales, así como la ya más común cafetería donde repondremos fuerzas o la otra granja en la que nos venderán semillas o abono. Los personajes se pasarán el día yendo y viniendo por las diferentes zonas del juego, pero podremos buscarlos desde nuestro mapa, cosa que será bastante útil a la hora de repartir pedidos, hacer favores o, por supuesto, ligar. Además, podremos darles regalitos para ir subiendo la amistad, aunque tenemos que tener en cuenta que no les va a gustar todo. Eso sí, se van a acordar de lo que les has regalado. Por ejemplo, podemos decidir regalarle una flor a alguien, pero si no es algo que le llame la atención no lo va a coger, y si a la misma persona le regalamos una naranja nos lo agradecerá porque es de nuestro huerto, y el próximo día que hablemos con esa persona nos contará lo rica que estaba. Pequeños detallitos que hacen que te animes más a la hora de relacionarte con la gente, sobre todo si te va a tocar ligar con una de las ocho personas disponibles, cuatro hombres y cuatro mujeres, convenientemente bisexuales para que no haya ningún problema en nuestra selección de cualquiera de los tres pronombres disponibles. Y, quién sabe, quizá liguemos gracias a un plato de carpaccio y acabemos teniendo descendencia, a la que podremos ver crecer a medida que pase el tiempo.

Reunión de vecinos

Antes comentaba el uso diario del calendario, y esto es porque aquí la cosa tiene más chicha de lo que parece. Nuestro año, como suele ser lo normal, se divide en cuatro estaciones. Sin embargo, estas estaciones duran sólo diez días. Diez días en los que tendrán que crecer nuestros cultivos a tiempo, lloverá, hará sol, y nos encontraremos con diferentes eventos. Cada pocos días un vendedor llamado Van vendrá a la plaza del pueblo, y le podremos comprar diferentes herramientas, ropa o bebidas con efectos especiales, además de poder venderle objetos más o menos valiosos que no nos permiten vender en nuestra caja. Estos pueden ser plantas que recojamos por los prados, peces que pesquemos o incluso objetos que desenterremos en la mina, porque puestos a ayudar acabaremos incluso desenterrando tesoros. Eso sí, este no será el único evento, porque tendremos algunos especiales en cada estación, con su pequeña cinemática mostrándonos un grupo de gente feliz en el pueblo, o quizá nuestra primera cita bajo los fuegos artificiales. 

Story of Seasons: A Wonderful Life es un pasito más hacia ese juego de granjitas perfecto de esta generación. Todavía no lo consigue, principalmente por cierta lentitud a la hora de arrancar derivada directamente de la época del título original, aunque esto no quiere decir que sea un mal juego, sólo que te pide un poco más de paciencia. Sobre todo porque irás viendo poco a poco cómo va siendo recompensada, ya sea con una nueva vaca, el amor de tu vida, o el crecimiento de tu criatura. El trabajo es duro, pero no hay nada más satisfactorio que encauzar tu vida en una comunidad de gente que se quiere y se apoya. Aunque sea de forma digital.

Humble Bundle Instant Gaming

Cómprame un café en ko-fi.com

Nix

I run on coffee, sarcasm and lipstick. Hace años le vendí mi alma a Bioware y me convirtieron en la Shadow Broker. Tengo un papelito que dice que soy N7, pero no quieren darme mi propia nave. Me gusta llevarle la contraria a la gente y por eso soy una Inquisidora enana y pelirroja.

No hay comentarios
Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

%d