Gente guapa⁹
Análisis de Charade Maniacs

23/06/2023 | Nix | No hay comentarios
A estas alturas de la vida (o de la web) ya no os puede sorprender el hecho de que nos hayamos caído en otro otome. A pesar de los muchos clichés que suelen acompañarlos o de que siempre hay algún personaje que nos saca de quicio y que al final resulta ser importante, lo cierto es que pesa muchísimo más el cariño que acabamos desarrollando hacia toda esa panda de idiotas que intentan ligar con nosotras. Y, la verdad, esto es lo que me ha sucedido al jugar a Charade Maniacs, que fui por la gente guapa y me quedé porque… bueno, dejémoslo en que es un poco spoiler. La cosa es que, en el fondo, quiero mucho a toda esa gente.
Charade Maniacs es un título nuevo en nuestras estanterías, pero que se lanzó en 2018 sólo en Japón para PS Vita (no por nada es la mejor máquina de otomes). Por suerte, un poco impulsado por la propia existencia de la Nintendo Switch, últimamente nos han estado llegando a Occidente muchos de esos juegos que no habían salido de Japón. La localización al inglés, a falta de una en nuestro propio idioma, nos facilita bastante las cosas, y Charade Maniacs es justo uno de esos títulos que se beneficiará enormemente de ello. Y es que, las cosas como son, cada vez hay más fans de este tipo de juegos en los que nos podemos relajar leyendo una historia mientras intentamos ligarnos a un señor guapo que pasaba por allí.
El argumento comienza cuando Hiyori Sena, nuestra protagonista con nombre personalizable, termina sus clases de instituto y se prepara para unas bien merecidas vacaciones de verano. Sin embargo, cuando está regresando a casa con su amigo de la infancia, se topan con un extraño personaje que los acaba secuestrando y llevando a un lugar desconocido, una ciudad desierta a la que llaman Arcadia. Desierta, salvo por 8 personas más que también han aparecido allí de la misma forma. Poco después todo el mundo se entera de que están en ese lugar formando parte de un juego estrambótico en el que cada día deben actuar en ciertas obras teatrales que les darán o quitarán puntos, dependiendo de cómo lo hagan. Dichos puntos serán la clave para conseguir la libertad, pero si por el contrario los pierden y acaban con menos de cero… no les espera nada bueno.
Si bien la primera parte del juego nos va a permitir conocer a todos los personajes al mismo tiempo, pronto nos plantearán unas variables que lo cambiarán todo por completo. La primera de ellas es que todo el mundo está allí en contra de su voluntad salvo una persona, que es quien orquestó ese plan de entretenimiento tan elaborado. Eso sí, en ningún momento nos dirán quién es, nos tocará descubrirlo por nuestra propia cuenta, teniendo que sospechar hasta del inexistente perro del vecino. La otra variable es que, más o menos hacia la mitad del juego, los 9 personajes romanceables se separarán en tres grupos, y nos tocará escoger a cuál elegimos para continuar con la trama. El primero, formado por Kyoya Akase, Mamoru Chigasaki y Mei Dazai, es el grupo de información, y se dedicarán a investigar los alrededores y rebuscar de arriba abajo para intentar conseguir una salida para volver a casa. El segundo equipo, el de cocina, formado por Keito Ebana, Takumi Haiji y Mizuki Iochi, será el que se encargue de que todo el mundo esté bien alimentado. El tercero (y personalmente mi favorito) es la cuadrilla de limpieza, formada por Tomose Banjo, Ryoichi Futami y Souta Gyobu, quienes se encargarán de que todo esté limpio y reluciente, porque la convivencia es algo que sólo se puede mantener con cierto orden. Como es lógico, en cada grupo nos enteraremos de lo que va sucediendo únicamente allí, con ciertas coincidencias a la hora de ir avanzando en la trama, y será la clave para escoger a quién podremos romancear, ya que al pasar el tiempo con tres personas, nos tocará elegir entre esas. Pero no os preocupéis, porque es bastante probable que acabéis rejugándolo varias veces, porque cada una de las rutas nos encajará ciertas piezas del puzle. Aunque, como suele ser común en este tipo de juegos, sólo una llegará hasta el fondo del asunto.
Si bien es cierto que, en general, Charade Maniacs es un juego que me ha gustado mucho, no puedo evitar pensar en que tiene algún que otro fallo. El primero, más que común en este tipo de juegos, es la ausencia de más idiomas aparte del inglés, como el castellano, que hará que se siga limitando ese público. Que sí, que es más fácil aprender inglés que japonés, pero no todo el mundo tiene la habilidad o la paciencia para leer durante bastantes horas en un idioma que no es el suyo. Otra pega que le veo, y que voy a decir sin spoilers aunque cuando juguéis me entenderéis, es el hecho de que se haya escondido tanto el true ending, siendo muy difícil sacarlo si no lo rejugamos de arriba abajo. Comprendo el motivo, y sin embargo me parece bastante arriesgado, siendo probable que haya mucha gente que no llegue a descubrirlo todo. Y por último, y ya dejo de quejarme, se echa un poco de menos el hecho de tener el romance tan relegado hacia el final del juego. Se centra por completo en la trama principal del grupo, y el tema de los amoríos está muy bien, pero se hace corto.
Charade Maniacs es un título perfecto para quien no viene únicamente por el romance o para la gente que quiere empezar a asomarse al mundillo de los otomes. La trama consigue hacer que mantengamos la atención en todo momento, tratando de descubrir al traidor y debatiendo de forma interna cada pequeña decisión porque no sabemos en quién confiar pero al mismo tiempo nos fiamos de todos. Qué se le va a hacer, nos aparece delante un montón de gente guapa y nos acaba pareciendo bien un secuestro y tener que convertirnos en Michelle Yeoh. Y tú, ¿conseguirás salir de Arcadia?
I run on coffee, sarcasm and lipstick. Hace años le vendí mi alma a Bioware y me convirtieron en la Shadow Broker. Tengo un papelito que dice que soy N7, pero no quieren darme mi propia nave. Me gusta llevarle la contraria a la gente y por eso soy una Inquisidora enana y pelirroja.