[Review] GXT 735 Mylox de Trust

Me habréis oído muchas veces decir que no juego en móvil por el consumo de batería y demás. Sin embargo, esto no siempre ha sido así ni es una razón de fuerza para esta decisión. Y no hablo de haber pasado horas matando el tiempo con serpientes, marcianitos o, más adelante, caramelos. Son muchos los juegos que he probado en móviles y tablets. Sobre todo, los de puzles táctiles que me resultan especialmente satisfactorios, ya sea escapando de habitaciones, resolviendo misterios o encontrando objetos. Sin embargo, otros títulos me cuesta más siquiera darles una oportunidad simple y llanamente porque los controles se me hacen bola. Tal es el caso de Fall Guys o Stardew Valley. Por ello, no quería perder la oportunidad de probar el GXT 735 Mylox de Trust, un controlador gaming inalámbrico para móvil.

Cabe decir que éste no es tanto un mando al uso, sino más bien un adaptador en el que colocaremos nuestro móvil aprovechando su flexibilidad. Y no me refiero a una flexibilidad material, ya que se trata de un dispositivo de dureza consistente. El GXT 735 Mylox se presenta como una especie de mando con una apertura central en la que pondremos nuestro terminal y se estirará hasta ajustarlo perfectamente. El resultado se parecerá a tener en las manos una Switch o una Steam Deck, salvando las distancias.

Lo primero que llama la atención al abrir la caja del GXT 735 Mylox de Trust es encontrarnos el mando envuelto en una bolsita de tela suave ocupando todo el espacio. Al sacarlo no veremos más parafernalia que la guía de usuario y la información legal del producto. Además del cable de carga USB-A a USB-C de 100cm situado tras un falso fondo que crea el cartón de la propia caja. Todo muy comedido y siguiendo la norma de reducir al mínimo los residuos en la medida de lo posible.

El GXT 735 Mylox se conecta tan fácilmente a nuestro móvil, sea Android o iOS, como se adapta al soporte extensible del mando. Y no deberemos temer que nuestros terminales se deslicen o se muevan durante nuestras partidas. El dispositivo no sólo cuenta con una pestaña inferior que hace de tope, sino que el material sobre el que se apoya el móvil es antideslizante. Además, el lateral extensible se ajusta al tamaño del dispositivo con cierta presión. Sin pasarse, claro está, lo suficiente para aportar sujeción sin chafarnos el móvil.

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Una vez nos hemos asegurado de que nuestro terminal está seguro en su posición horizontal, encenderemos cómodamente el mando si mantenemos pulsado el botón Home. Podemos hacerlo antes de colocar el móvil, claro está, pero así podemos trastear sin accionar botones. No tardaremos en descubrir que el dispositivo se ha encendido porque se activará tanto la iluminación RGB como el indicador Bluetooth. 

La iluminación RGB se reparte sin resultar excesiva con luces LED bajo los botones de acción (X, Y, A, B) y los dos joystick. En cualquier caso, si no es santo de la devoción de quien vaya a jugar, se puede apagar sin problema. También dejar un solo color fijo en lugar del arcoíris en movimiento o apagar o encender la iluminación de los botones de acción. Por otra parte, ofrece tres opciones para el modo turbo: fast, medium, slow. Sin embargo, hacer estos ajustes será incómodo con una sola mano en algunos casos, obligándonos a apoyar el dispositivo en una superficie plana para interactuar con los botones necesarios. Sí será rápido y cómodo apagarlo, desacoplar nuestro móvil y guardarlo.

Además, el tamaño del GXT 735 Mylox de Trust, sin la suma de nuestro terminal, lo acerca bastante al de un mando al uso. Esto no solo significa que buscarle un espacio en casa cuesta entre poco y nada, sino además que llevarlo de viaje es bastante cómodo. Por aquí, no es ningún secreto la de horas que paso semanalmente viajando en tren y debo admitir que llevarlo en el bolso no me ha supuesto ningún problema de espacio. Y ello sin ser gigante. Por supuesto, sobra decir que su peso tampoco es un inconveniente, dado que es el estándar para un mando. Lo suficientemente consistente para no resultar plastiquero y con un peso que no castiga nuestras muñecas.

Y lo mismo ocurre con el agarre, dado que parecerá que tenemos un mando de Xbox en nuestras manos, pero alargado como una Nintendo Switch. De modo que alcanzaremos sin problema todos los botones necesarios en nuestras partidas, sean gatillos, cruceta o de acción. También es agradable manejar los joysticks, ya que presentan una dureza ligeramente superior a la de un mando de Xbox Series S/X o un DualSense, pero sin llegar a entorpecer nuestro movimiento. Tampoco descartemos que a estas alturas mis mandos de referencia tengan su trote y esa sea la verdadera diferencia. Por su parte, la resistencia de los botones a nuestra presión es la habitual.

Todo ello implica que podremos jugar con total normalidad sin tener que adaptarnos al mando y con independencia de para qué lo usemos. Siempre y cuando sea compatible con el juego, claro está. Por mi parte, lo he probado sobre todo con Stardew Valley sin ningún problema destacable. De hecho, incluso la batería del GXT 735 Mylox de Trust ofrece una autonomía considerable, llegando aproximadamente a 12 horas. Y dado que su carga dura en torno a las 3 horas, pero podremos seguir utilizándolo, el límite lo marcará la batería de nuestro móvil.

Además, el GXT 735 Mylox de Trust es compatible con juego en la nube como Amazon Luna, Xbox Cloud Games y Nvidia GeForce Now y juego remoto como Steam Link, Xbox y PlayStation Remote Play y Moonlight. Y, por supuesto, Apple Arcade, Netflix Games y cualquier aplicación compatible con mandos.

A estas alturas, no son pocos los componentes que utilizo en mi día a día de Trust y de su sección gaming GXTrust. Sin embargo, parece que nunca deja de sorprenderme con pequeñas joyas que no paro de recomendar como su ratón vertical o este mando inalámbrico. Se trata de dispositivos que, a simple vista, no parece que vayan a marcar la diferencia, pero que sin duda lo hacen. Y quizás sea porque estoy acostumbrada al manejo de Steam Deck y Nintendo Switch, pero me resulta más cómoda esta versión de mando para móviles que aquellas destinadas a conectar el móvil como un pequeño monitor sobre el mando tradicional. O puede que sea una cuestión de gustos, quién sabe.

En cualquier caso, el GXT 735 Mylox de Trust me ha enamorado, tanto a la hora de ajustarse a mis terminales como en su manejo. Y su diseño, que podremos escoger en negro o blanco, con partes rugosas y la iluminación RGB, es sencillo, pero atractivo. Ofreciendo esa distinción de “cacharrito gamer” sin perder la suavidad, la comodidad o la elegancia. Y sin resultar excesivo o extravagante, pero tampoco serio o demasiado oficinista. Un equilibrio natural, como el ocio centrado en los videojuegos en la vida adulta. Como ir en un tren destino Adulting, hurgar en el bolso, sacar el dispositivo y perderse en Stardew Valley como quien saca unas gafas para leer. O un portátil para ver una serie o una película.