Análisis de The Last of Us Parte I (PC)

Si de verdad hay un título que tenía ganas de que dejara de ser exclusivo de PlayStation y llegara a mi ordenador, ese era The Last of Us Parte I. Conocía la historia, disfruté la serie de HBO y estaba deseando empuñar los mandos yo misma. Incluso me mentalicé ante la posibilidad de tener que usar uno si el control con ratón y teclado no era como esperaba. Y hasta compré un DualSense enfundado en insolente color rosita. Bueno, vale, es posible que esto no fuera específicamente para The Last of Us, pero ahí lo llevo.

En este galardonado título de Naughty Dog acompañaremos a Joel y a Ellie en su viaje por unos Estados Unidos que han sucumbido a una terrible pandemia global debido a un hongo conocido como cordyceps. La civilización ha quedado mermada, reducida a comunidades de supervivientes de diversa índole, y el mundo tal y como lo conocemos está plagado de infectados. Los caminos de nuestros protagonistas se unen cuando un día la líder de los Luciérnagas, Marlene, contrata a Joel para sacar a Ellie de la zona militar de cuarentena y llevarla con sus compañeros. Pronto descubriremos que esta joven de 14 años no es como el resto.

¿Que por qué no entro en el terreno de los spoilers cuando ya todo el mundo sabe de qué va la historia? Por si acaso. Dicho esto, no puedo dejar de mencionar las condiciones en las que salió el juego. Y es que, por cuestiones que no vienen al caso, tardé unos días en asomarme al título y me encontré con que The Last of Us Parte I no estaba debidamente optimizado. Sin embargo, he de decir que la experiencia ha mejorado bastante tras el primero del que asumimos que serán muchos parches. Pero no hemos venido aquí a echar leña al fuego.

Estamos ante un título donde, si bien la violencia es la norma, se promueve mucho el uso del sigilo. De este modo, podremos escuchar atentamente para atisbar posibles amenazas y planificar la ruta más segura. Y utilizaremos, por ejemplo, botellas y ladrillos para desviar la atención de los enemigos. O no, ya que también podremos escoger matar a todo lo que se mueva. Aunque en este caso debemos tener en cuenta que ni la munición ni las armas cuerpo a cuerpo sobran. Así como tampoco los utensilios para curarnos. Además, los enemigos pegan duro, tienen buen ojo u oído, y no se andan con tonterías.

Para hacer de nuestra supervivencia algo menos crudo, podremos recolectar suministros con los que mejorar nuestras armas o crear munición y otras herramientas, como botiquines o dagas. Asimismo, a lo largo de nuestra aventura encontraremos manuales con los que desbloquearemos conocimientos de supervivencia como aumentar el radio de acción de los explosivos, por ejemplo. También podremos mejorar algunas habilidades, como aumentar nuestra salud máxima o la velocidad de fabricación, utilizando suplementos que encontraremos explorando el entorno.

En cualquier caso, en The Last of Us Parte I podremos escoger la dificultad que deseamos afrontar. Y encontraremos para todos los gustos, tanto si preferimos disfrutar de la historia sin quebraderos de cabeza como si queremos sudar la gota gorda. Esto afectará al nivel de reto que encontraremos en nuestra supervivencia, pero también a las recompensas que desbloquearemos en el apartado de Extras.

Además, entre el contenido adicional encontraremos comparaciones entre la versión de 2022 y la de 2013, así como vídeos y podcasts entre otras cosas. Y, una vez completada la historia principal, podremos desbloquear formas de cambiar el aspecto o el comportamiento del juego, como viene a ser costumbre entre los títulos de Naughty Dog.

En The Last of Us Parte I también contaremos con una serie de coleccionables que, si nos saltamos durante nuestra primera partida, podremos recuperar gracias al selector de capítulos. Apartado donde, además, podremos saber qué nos falta y dónde, para que resulte más orientativo a quienes sientan el picorcillo del coleccionismo. Y si nos desviamos tanto del camino como para no saber bien hacia dónde tenemos que ir, el juego nos ofrecerá alguna que otra pista.

Además, cuenta con numerosos controles de accesibilidad, algunos de los cuales pueden facilitarnos mucho las cosas a la hora de afrontar la partida. Especialmente si apuntar con el mando no es nuestra mayor virtud, pero queremos disfrutar de las ventajas de utilizar un DualSense. Y es que éstas son muchas y marcan la diferencia frente a otros tipos de controlador. Desde una amplia variedad de opciones de vibración hasta la resistencia de los gatillos con determinadas acciones. Aunque se maneja igual de cómodamente con ratón y teclado, una vez nos hacemos a los controles, todo sea dicho. Por suerte, nuestros primeros pasos en el juego servirán a modo de tutorial, y también nos permiten reajustar dichos controles a nuestro gusto si es necesario.

The Last of Us Parte I se encuentra disponible en múltiples idiomas, entre ellos el nuestro. Y el equipo de traducción y localización está acreditado de forma general en el apartado correspondiente. Además, podremos poner voces y textos en idiomas diferentes, así como configurar los subtítulos a nuestro gusto. Todo esto favorece no sólo la inmersión en el juego, sino la exploración en busca de notas.

A ello se suma el espectacular apartado audiovisual del título. Y es que si gráficamente invita a recorrer cada rincón en busca de todo tipo de detalles, quemando el botón de capturar pantalla y el modo foto, el sonido hace que nos terminemos de sumergir en una experiencia única. Además, en ocasiones surgirán conversaciones opcionales que enriquecen la aventura. Y lo mismo ocurre con su DLC, Left Behind, al que se recomienda jugar tras haber completado la historia principal. En él, nos asomaremos a un fragmento del pasado de Ellie, conociendo más sobre el personaje y presenciando el momento que marcó un antes y un después en su vida.

Con esta versión de The Last of Us Parte I, estamos ante una joya que todavía está por pulir. Tanto que da rabia. Esta estrepitosa llegada a nuestros ordenadores quizás no hubiera dolido tanto de no ser por el éxito rotundo que ha tenido la serie de HBO protagonizada por Bella Ramsey y Pedro Pascal. Si bien ya se han solucionado algunos de los problemas más grandes que tuvo en su lanzamiento, todavía le falta algún que otro parche para convertirse en lo que debería haber sido. Y esta es una práctica a la que no sólo no nos acostumbramos, sino que me atrevería a decir que cada vez quema más.

Sin embargo, si dejamos esto a un lado, estamos ante un título que se ve y se siente increíblemente bien. Tanto es así que jugar con auriculares produce un nivel de inmersión tal que incluso nos sobresaltaremos más de una y dos veces. Además, no importa la cantidad de veces que vivamos su historia, porque logrará emocionarnos todas y cada una de ellas. Y es que si algo es seguro, es que la aventura de Joel y Ellie, los personajes en sí mismos y la forma en que todo se ha construido, atrapa. Hasta tal punto que, una vez terminado el juego, seguiremos pensando en él, y sobre todo en su final. Bueno, y en los chistes de Ellie.