Reseña de El despertar del corazón

Si seguís la web desde hace tiempo, os habréis fijado en que varias personas de la redacción sentimos un amor desmesurado por Kingdom Hearts. Esta saga nos ha acompañado a lo largo de nuestra vida y tiene un hueco en nuestro corazón. Así que cuando Héroes de Papel anunció el lanzamiento de El despertar del corazón, de Alejandro Linares, tuvimos un duelo épico por ver quién sería la Elegida para leérselo. Por suerte, recordamos a tiempo que es mejor ser amigas que otra cosa. Pero esa es otra historia que debe ser contada en otra ocasión.

Antes de empezar, me gustaría comentar que la crisis del papel vio afectado el lanzamiento de la edición especial del libro, lo que me hizo tener flashbacks de guerra de otros juegos de Square Enix y temer que, como me ocurrió con el tercer juego, nunca llegaría. Pero fue todo una falsa alarma y no hubo que experimentar ningún retraso. Nos encontramos de nuevo con un libro en tapa dura y que usa papel de pulpa, en vez del satinado que solemos encontrar en otras publicaciones de la editorial con imágenes a color. Este hecho no resta calidad a El despertar del corazón y hace que sea más sencillo de leer, ya que no tenemos que buscar el ángulo de luz perfecto para no generar un reflejo en la página. Por el contrario, la maquetación en esta ocasión no es mi favorita. Sigue el mismo formato que otros libros de la editorial, como Portal o la ciencia del videojuego, de Eva Cid. Tenemos un amplio margen en la parte interior de las páginas y poco en la parte exterior, que lo hace un poco incómodo de leer y que no se aprovecha bien.

Esto no es más que una cuestión de gustos, pero hay otra elección de maquetación que considero un error y es escoger una combinación de gris medio con letra blanca para las introducciones de cada capítulo. Ya no se trata de comodidad, sino que el poco contraste entre las letras dificulta la lectura. En un momento en que se está poniendo por fin el foco en la accesibilidad como algo imprescindible, este tipo de cosas se deben tener en cuenta.

Salvo estos dos aspectos más negativos, la edición del libro está cuidada, igual que su contenido. Como no podía ser de otra manera, El despertar del corazón empieza por el principio. En este caso, por el universo, contando la historia en orden cronológico y con todo el contenido disponible actualmente, que llega hasta Melody of Memory. Resumir la historia de Kingdom Hearts es complicado y aquí Linares lo solventa con bastante elegancia, conectando todo lo posible los distintos hechos. Un trabajo impresionante, pues como comenta más adelante, la historia se va embrollando a cada nueva entrega. Una vez estamos en situación, pasamos a conocer sobre la creación. En este episodio se pone el contexto histórico, no sólo del primer juego, sino de toda la saga. También hay un pequeño resumen de la trayectoria de Tetsuya Nomura, el responsable final de la misma.

La edición especial cuenta con un estuche y un póster que realiza un análisis de la música de la saga, entre otras cosas

El tercer capítulo trata de la historia. No de los hechos que acontecen, ya narrados, sino que habla de influencias y contextualización de algunos elementos de la saga. El siguiente capítulo es sobre los personajes, al menos los más relevantes. Y se extiende un poco más sobre qué encontramos en la parte del universo, con un breve análisis de cada uno de ellos. Particularmente, encuentro un poco decepcionante que no haya un análisis más profundo de las relaciones entre algunos personajes, especialmente la de Sora y Riku, que daría para muchas páginas. Para continuar, en “El RPG de acción” se hace un repaso del gameplay de las distintas entregas, un aspecto que no se suele tener en cuenta al hablar de la saga, y que resulta más definitorio de la misma y de su género de lo que pensamos.

Siguiendo con aspectos técnicos, se hace mención, como debe ser, a la banda sonora de Yoko Shimomura. Que no ha hecho otra cosa que escalar en la creación de temas para la saga, manejando con maestría los leitmotiv, integrándolos y mezclándolos a lo largo de todo Kingdom Hearts, además de crear piezas emblemáticas y que son parte de la cultura musical videojueguil. El siguiente apartado, que inicia el cierre del libro, habla sobre el fandom. Y es un punto que encuentro escaso para todo lo que ha dado. Tanto tiempo entre juegos principales permite elaborar muchas teorías y he echado en falta una recopilación de las mejores, o profundizar más en la evolución del seguimiento de la saga en todo este tiempo. Hay pequeños comentarios sobre los foros que evolucionaron a redes sociales y wikis, pero es un aspecto muy interesante que no se trata mucho y que lamento. Y más cuando el autor formó parte de algunos de los lugares más emblemáticos del fandom español.

Interior del libro, donde podemos apreciar la maquetación

Antes de entrar en las conclusiones, bibliografía y agradecimientos, se dedica un pensamiento a los finales secretos y su forma de tener a la gente enganchada a base de cliffhangers espectaculares. Destacan los casos del final secreto del primer y segundo juegos, que muestran personajes y hechos que tardaríamos en conocer. Aquí, se subraya una vez más lo que ya sabe la gente fan: que aunque al final todo esté hilado, hay cosas que se nota que buscan más el efectismo y el cliffhanger que la coherencia. La parte final me ha gustado, pues cuenta con una buena fuente de referencias. Y en el epílogo es donde leemos más al fan de la saga y se resume muy bien mi sentir respecto a todo Kingdom Hearts.

Una vez sabemos qué hay dentro del libro, queda saber cómo está escrito. Lo primero de todo es que se nota que Linares es un verdadero fan de la saga. Esto no es un reparto de carnets, sino que conoce y reconoce los fallos que arrastra. Sobre todo en la forma de contar la historia, como acabo de comentar. También lo es en el sentido de que jugó siendo adolescente al primer juego y ha seguido ahí. Define muy bien ese sentimiento de pertenencia y lugar al que regresar de aquellas personas que hemos crecido con ella. No quiero decir que “si no lo viviste, no sabes qué es”, pero mucho de Kingdom Hearts tiene un factor temporal que no conviene despreciar y que ha marcado a una generación muy concreta de personas, como muy bien se señala en el libro. La saga nos llegó en un momento muy concreto que nos ha permitido crecer con ella.

La portada emulando ese sitio que también conocemos

Siempre he considerado que ésta es una saga que sólo puedes vivir con pasión exacerbada desde las tripas y las entrañas. Es un asunto del corazón y no de la razón. Y el autor lo tiene muy claro, tal como lo muestra en el epílogo. Y como fan, he echado en falta ese corazón en el resto. Todo el libro es principalmente enciclopédico y recopila mucha información (da gusto leer el “resumen” de la historia) y es un buen material de consulta. Esta contención, que tira más a lo académico, es el único fallo que podría tener, y ni siquiera lo es mucho, sabiendo cuál es la línea de la editorial. Pero si hay algo que necesita chillidos incoherentes de fan, es Kingdom Hearts.

El libro es una excelente obra de recopilación, ya sólo por el hecho de tener un resumen muy largo de la historia. También es encomiable la labor de contención a lo más académico, como digo, aunque en ocasiones hubiera agradecido algo más centrado en el detalle o una mayor extensión en general de todos los aspectos. Pese a estos comentarios, si alguna vez en los últimos años habéis pensado en volver a la saga pero no teníais ni idea de por dónde empezar, El despertar del corazón es un buen punto de partida. Y las recopilaciones, el siguiente. A partir de ahí, queda sentarse a esperar, sufrir por el goteo de actualizaciones y no dejarse de preguntar por qué han dejado al niño durmiendo diez días en un sofá. Y desear que no pasen otros trece años antes de tener el cuarto título en nuestras manos.

Copia de prensa facilitada por Héroes de Papel.