Vanpiro esiten

Análisis de Redfall

Análisis de Redfall

El de Redfall fue uno de esos anuncios que agitó la redacción de Todas Gamers. Algunas por Arkane y otras por los vampiros, la verdad es que la mitad estábamos vibrando en nuestros asientos. En mi caso, además, algunos de los ingredientes del título que recordaban ligeramente a la fórmula de Left 4 Dead. A estas alturas ya sabéis lo que me gustan los shooters cooperativos para cuatro personas. Sin embargo, Redfall no tardó en promocionarse como mucho más que un Left 4 Dead: Vampiros.

Nos encontramos en la ciudad de Redfall, Massachusetts. Una legión de vampiros la tiene asediada y ha tapado el sol. Y no solo eso, sino que también ha conseguido aislar a la población y el marrón nos ha pillado intentando huir en ferry. Así pues, no tardaremos en buscar la forma de sobrevivir a este apocalipsis vampírico. Aunque, lo primero es lo primero, deberemos hacernos con algún arma y buscar a más supervivientes. ¿Quién sabe? Quizás descubramos qué ha provocado todo esto, mientras borramos a unos cuantos chupasangres por el camino.

Estamos en un shooter, por lo que buena parte de nuestro arsenal serán armas de fuego. Y el resto estacas que incorporar a nuestro armamento y poco más. También podremos atacar cuerpo a cuerpo, pero más como un acto defensivo o reflejo que como algo realmente útil. Lo que sí será de gran ayuda serán los suministros médicos que llevemos encima, aunque picotear alimentos que encontremos por ahí tirados también nos ayudará a recuperar algo de vida.

Asimismo, escogeremos entre cuatro personajes con personalidad y habilidades diferentes. Devinder, por ejemplo, puede teletransportarse, Layla invocar a su ex novio vampiro para que la ayude, Remi utilizar a Bribón como señuelo y cebo, y Jacob ocultarse de los enemigos tras un velo de invisibilidad. Cada uno de ellos cuenta con tres poderes que, junto a otras cosas, podremos mejorar en un árbol de habilidades. Y es que conseguiremos experiencia y subiremos de nivel conforme vayamos completando misiones y superando enfrentamientos. Además, podremos equiparnos vestigios de sangre con los que obtendremos ciertos beneficios.

Podemos seleccionar al personaje que más nos atraiga por estética o personalidad, u optar por uno según nuestro modo de juego, aunque todos son igual de útiles en la partida. Esto se debe, en parte, a que si bien parecen enfocados a un rol dentro del equipo, en caso de jugar con otras personas, todos se comportan de forma similar en la partida. Es decir, no cuentan con habilidades pasivas o predilección por un tipo de arma en concreto.

Personajes de Redfall.

Por su parte, el abanico de armas a nuestra disposición incluye desde lanzaestacas, lanzabengalas y emisores de luz ultravioleta, hasta otras más cotidianas como pistolas, escopetas, fusiles de francotirador y rifles de asalto. De igual modo, encontraremos diferentes grados de calidad entre ellas. Y podremos desmantelar aquellas que no vamos a utilizar para obtener dinero que invertiremos en las diferentes estaciones de provisiones.

Eso sí, es recomendable llevar en la mochila al menos un arma de cada tipo, ya que nunca se sabe qué enfrentamientos nos esperan ni cómo iremos de munición. Aunque nunca está de más valerse de los elementos del mapa para ahorrar recursos. Y si bien podremos llevar equipadas tres armas a placer, debemos asegurarnos de llevar siempre una con estaca integrada.

Además, no todas las armas pueden llevar incorporada una. Y es que el armamento convencional solo sirve para debilitar a los vampiros o matar a sus secuaces humanos. El toque de gracia debe hacerse siempre clavándoles una estaca directamente en el corazón. En cuanto a la munición, podremos reabastecernos en cualquier refugio o saquear los cuerpos de los enemigos abatidos. Y también la encontraremos explorando el mapa. Además de buena cantidad de objetos que se transformarán automáticamente en dinero.

Redfall ofrece un mundo abierto, permitiéndonos adentrarnos en buena parte de los edificios de la ciudad. Asimismo, podremos colocar un marcador en el mapa, que aparecerá en la brújula superior, para que nos orientemos mejor. También tendremos la opción de viajar rápidamente entre refugios, aunque primero tendremos que desbloquearlos, para lo cual deberemos activar el generador. Y a menudo esto implicará eliminar algún que otro enemigo o resolver algún puzle.

En estos refugios encontraremos suministros médicos y munición, pero también misiones secundarias que servirán para hacer que el vecindario sea más seguro. Sin embargo, la base principal de operaciones será el parque de bomberos, y desde allí escogeremos las misiones principales. No podremos activar varias a la vez e iremos seleccionando la que más nos interese en cada ocasión, lo cual es perfecto para adaptar la partida a lo que nos apetezca hacer en ese momento. De igual modo, podemos explorar libremente la ciudad y echarnos al bolsillo todo lo que veamos o buscar coleccionables, aunque lo ideal es tener una misión que cumplir.

Captura de pantalla de Redfall. Layla y un vampiro.

En cualquier caso, Redfall cuenta con un selector de dificultad a través del que escogeremos el nivel de reto que queremos afrontar. Y si bien no se trata de un juego complejo, se disfruta más en compañía. En caso de optar por jugar con amistades u otras personas, podremos crear una sala o unirnos a una ya creada. Y dado que no cuenta con emparejamiento aleatorio, invitaremos o nos invitarán a las partidas. El nivel de los miembros del grupo se adaptará para que la experiencia sea satisfactoria para todo el mundo por igual. Además, jugar con otras personas hará que presenciemos diálogos únicos de los personajes y, por supuesto, bonificaciones para todo el equipo.

Nuestros primeros pasos servirán a modo de tutorial y, si necesitamos refrescar algún punto, podremos consultar el apartado correspondiente desde el menú del juego. Asimismo, encontraremos múltiples opciones de accesibilidad con las que configurar nuestra partida a placer o necesidad. Y también podremos cambiar la apariencia de armas y personajes con aspectos que desbloquearemos a medida que juguemos.

Cabe decir que si bien se trata de un shooter, podremos optar por estrategias de sigilo para superar algunas zonas. La forma en la que afrontemos nuestra partida dependerá de cada persona, aunque quizás no nos interese llamar demasiado la atención de las deidades vampíricas… o sí. En cualquier caso, si morimos apareceremos en la placa conmemorativa o refugio más cercano, por lo que no está de más pararse a encender generadores de vez en cuando.

En lo técnico, muestra un apartado audiovisual muy cuidado y que invita a sumergirse. Además, podemos jugar cómodamente tanto con ratón y teclado como con mando, y funciona a las mil maravillas en Steam Deck. Destacan, además, los diálogos del personaje escogido, que reaccionará a lo que ocurre de forma natural, desde la salida o puesta del sol hasta el fin de un enfrentamiento. El resto de personajes resultan lo suficientemente interesantes como para querer dialogar con ellos o cumplir las misiones que nos ofrecen. Y que el título esté traducido y doblado a nuestro idioma, entre otros, resulta muy satisfactorio. Así como encontrar acreditada la labor del equipo de localización en el apartado correspondiente.

Captura de pantalla de Redfall. Layla utilizando la habilidad paraguas.

Tenía muchas ganas de hincarle el diente a Redfall. Se trata de un shooter que ofrece un mundo abierto en el que merece la pena sumergirse en solitario o con otras personas. Explorando cada rincón, encontraremos información sobre el trasfondo del juego, pero sin llegar a resultar excesivo ni algo que debamos hacer para entender bien la historia. Además, cuenta con ese punto de terror añadido que supone escuchar de forma imprevista los susurros de un vampiro que no dudará en saciar su sed de sangre con nuestro personaje.

En su dificultad intermedia, los enemigos no resultan difíciles de afrontar, pero tampoco será un paseo. Una mala combinación de factores puede suponer nuestra muerte y tener que volver al punto en el que estábamos para seguir avanzando, o explorando. Asimismo, la variedad de misiones nos llevará a movernos por todo el mapa. Algo para tener en cuenta si la amplitud del mundo abierto nos bloquea a la hora de decidir a dónde ir o por dónde empezar.

Sin lugar a dudas, Redfall cuenta con los ingredientes necesarios para convertirse en mi nuevo pozo. En solitario es bastante inmersivo y en compañía la diversión se magnifica. Ello sin pretender innovar en exceso dentro del género ni querer postularse como juego del año. Y es que no encontraremos capítulos cerrados que recorreremos refugio a refugio, oleadas de enemigos interminables o bots que rellenen los huecos de esos personajes que nadie escoge. Pero ofrece un mundo abierto que invita a ser explorado y una historia que mantendrá nuestra atención. Dicho lo cual, permitidme que vaya a comprobar las luces ultravioleta, que me ha parecido escuchar algo y no creo que sean mosquitos.

Cómprame un café en ko-fi.com

Aonia Midnight
Aonia Midnight @AoniaMidnight

Curiosa, reflexiva y torpe // Palomitas y cerveza // Psicóloga porque lo dice un título // Mi mente está llena de mundos en los que evadirme // Nothing is true, the cake is a lie

No hay comentarios
Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: